El bótox tiene el poder de rejuvenecer la expresión alisando arrugas y relajando el rostro haciendo que la piel luzca más descansada y fresca. Es una técnica que se utiliza desde hace décadas y sigue siendo de los tratamientos estéticos más demandados en la actualidad.
En nuestros días este tratamiento solo puede realizarse en centros médicos, con Autorización de Depósito de Medicamentos por la Consejería de Sanidad, y siempre por médicos especialistas. El Centro de Tratamientos Médico-Estéticos Felicidad Carrera, nos desvela todo lo relacionado con la toxina botulínica y su uso, maestría y prudencia son las claves.
La toxina botulínica o bótox es una neurotoxina sintetizada que se obtiene a través de una bacteria y purificada para su uso en humanos. Fue descubierta a finales del S.XIX pero hasta los años 50-70 no se demostraron sus efectos sobre los músculos.
En el año 2002 fue aprobada por la Agencia Americana de Control de Medicamentos y Alimentos y actualmente ha sido aprobada en 75 países para su uso en patologías neurológicas y en 40 países para su uso cosmético (toxina botulínica tipo A).
El efecto de la toxina tiene lugar en la conexión entre el nervio periférico y el músculo, justo en el nivel donde se libera el neurotransmisor necesario para la contracción muscular, la acetilcolina. La toxina botulínica lo que haría sería bloquear la producción de acetilcolina produciendo una relajación muscular temporal.
Dado el efecto que tiene, las aplicaciones del bótox son para paliar las respuestas musculares-nerviosas exageradas como tics, estrabismo, exceso de sudoración, espasticidad o arrugas.
Preparación y efectos secundarios
Desde el centro de Felicidad Carrera aconsejar no tomar los días previos medicamentos que puedan interferir en la coagulación de la sangre como el ácido acetil-salicílico, o analgésicos, antiinflamatorios o antipiréticos como el ibuprofeno. Es conveniente no beber alcohol ni fumar unos días antes de someterse al tratamiento. La piel debe estar perfectamente limpia.
Los efectos secundarios después de inyectar la toxina botulínica son leves y pasajeros, dado el carácter temporal del efecto del bótox. Los efectos negativos suelen estar asociados con el proceso de infiltrado en la inyección misma por lo tanto pueden darse hematomas, dolor local, eritema, edema... incluso excesiva debilidad muscular que provocaría caída de párpados superiores o de cejas.
Es importantísimo elegir un centro de confianza que cuente con médicos especializados para asegurar que el tratamiento se realiza de la mejor manera posible. Una técnica incorrecta puede provocar un rostro inexpresivo y es necesario contar con las mejores manos para evitar esto. En Felicidad Carrera apuestan por la naturalidad ante todo y para conseguir los mejores resultados hacen un estudio exhaustivo del paciente (alergias, informes médicos, expectativas del propio paciente...). La prudencia a la hora de aplicar la toxina y la maestría para ejecutar el proceso son sus mejores armas para que el resultado sea satisfactorio.
¿Cuándo empiezan a notarse los efectos y cuánto duran?
Los efectos comienzan a notarse 48 horas después del tratamiento y llegan a su punto álgido en una semana. Una técnica rápida, eficaz y sin apenas efectos secundarios.
En pieles jóvenes (30-35 años) como tratamiento preventivo, recomendamos la infiltración solamente una vez al año y para pieles que necesitan suavizar las arrugas o líneas de expresión existentes (a partir de los 35-40 años) es aconsejable que se repita el tratamiento cada 6 meses para "educar" al músculo para contraerse con menos fuerza suavizando esas arrugas.
El precio del tratamiento en el Centro de Tratamientos Médico-Estéticos Felicidad Carrera es de 315€ a 515€.
Fotos| Shutterstock
¿Os realizáis este tratamiento?
¿Habéis pensado en hacerlo en algún momento?
Por desgracia, en la zona donde a mi me preocupan las arrugas, que es justo en el contorno de ojos (no patas de gallo, sino justo bajo los ojos) me comentó una doctora que no se puede usar bótox.
ResponderEliminarLa verdad es que es un tema al que no estoy cerrada, en absoluto.
Un besazo!
Pues yo que ya tengo casi 60 años y unas arrugas más que instaladas que corresponden a una mujer de mi edad y además pelirroja natural (¡¡¡todavía111); no me lo he hecho nunca y lo cierto es que aunque la idea es buena... pero luego a personas que he visto que lo llevan (algunas amigas, entre otras), no me gusta el resultado en ninguna, que es mucho decir, es cierto que les quitan las arrugas pero no me gusta la expresión que queda en sus caras, mira Isabel Pantoja, el último retoquito para su puesta a punto, ¡¡que desastre!! es que incluso parece mayor a pesar de no llevar arrugas... en fin que yo aunque la idea me gusta hasta ahora no he visto resultados que me hayan gustado, es decir, no las veo mejor sin arrugas que con ellas, no sé en el centro de Felicidad Carrera, una profesional con una fama maravillosa, y una persona que cuando la he visto en una entrevista me resulta muy agradable y me gusta su imagen, pero... tendría que ver a mucha gente con un resultado que me gustara para arriesgarme a hacerme algo que no sé si me va a gustar, río y sonrío muchísimo y no me gustaría que me cambiaran la expresión que tengo... ¡¡¡porque me gusta!!! me ha encantado el post y la posibilidad de poder explicar lo que pienso desde la perspectiva de alguien que no piensa en las arrugas que le van a salir, sino que las tiene y las asume con mucha dignidad, pero sigo pensando que me gusta la idea pero no los resultados... hasta ahora. Besos Cosuki y !!!Feliz año!!!!
ResponderEliminarDe momento no me lo planteo pero no te digo que más adelante, en un futuro, si preciso de "ayudas cosméticas" no lo descarto.
ResponderEliminarUn beso.
Me da mucho respeto y es algo que no me planteo, me voy aprendiendo a querer tal y como soy, aunque si lo necesitara se fijo que buscaría un centro de confianza como del que nos hablas.
ResponderEliminar¡Un besote!
Yo tengo 35 años y tengo 2 líneas finas en la frente a veces he pensado en ponerme pero me da algo de miedo.
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