El minimalista y sorprendente mundo de los aromas en Japón

Aunque es bien sabido que las japonesas cuidan muchísimo su piel gastando al año una importante cantidad de dinero en productos cosméticos para el rostro, la inversión en perfumería es muy diferente suponiendo menos del 1% del total de ventas del sector belleza.

¿A qué se debe esto? La respuesta es simple, a los japoneses no les gustan nada las fragancias intensas o marcadas que para ellos supone enmascarar el olor corporal y que les resultan demasiado fuertes para su perceptivo y sensible sentido del olfato.

Los japoneses prefieren los aromas naturales y rechazan los perfumes intensos

La piel debe oler a limpio, es una máxima para los japoneses, sin artificios, sin disfrazarla. Se considera de muy mal gusto llevar una fragancia marcada y les resulta francamente molesto. Sin embargo perfumar la casa con aromas naturales es muy habitual.

Ya no solo huyen de los perfumes intensos, sino que el uso del desodorante en invierno no es muy habitual entre gran parte de los asiáticos. Muchos tienen la gran suerte, como japoneses o coreanos, de que, gracias a una mutación genética, el sudor no produce mal olor en las axilas y por lo tanto el uso de desodorantes queda relegado únicamente al verano y con fragancia muy livianas.

Si el gasto el productos cosméticos para el rostro llega casi al 60% de la facturación del sector en Japón, la categoría de perfumes no obtiene prácticamente ventas en el país del sol naciente, siendo menos de un 1% lo que consiguen en ventas frente a los productos de cuidado facial. La tradición en cuidado de la piel es muy superior a la occidental y lo consideran como un verdadero ritual de belleza que necesita una metodología concreta como es el método Saho del que os he hablado en más de una ocasión.

Japón es un país que tiene una filosofía de vida minimalista, donde no entra la opulencia o la sofisticación de un perfume con notas marcadas. Fragancias ligeras que emulen el olor a ropa limpia, brisa, lluvia o el rocío en los pétalos de las flores frescas tienen más acogida que los perfumes de las grandes firmas que tanto nos tientan en Occidente. De hecho para los japoneses los occidentales enmascaramos nuestro "fuerte olor corporal" con este tipo de fragancias cuando ellos abogan por la sencillez y el olor a piel limpia es lo equivalente a la nota de elegancia o distinción que puede aportar un perfume para nosotros que para su delicado olfato es demasiado intenso y perturbador.

Curiosidades 

Los aromas cuanto más naturales mejor, después de sorprender a Occidente con fragancias tan insólitas como la de mujer recién duchada envuelta en una toalla, tronco recién cortado o tostadas de desayuno, recientemente en Japón ha salido al mercado una fragancia en spray con aroma a frente de gato. 

En Japón en gato es un animal fetiche, incluso hay cafés donde los clientes pagan por pasar tiempo con gatos (Neko Café), generalmente se encariñan con uno y suelen visitar siempre al mismo felino. La empresa japonesa online Felissimo, dedicada a productos relacionados con el mundo de los felinos, realizó una encuesta entre sus seguidores de Twitter pidiendo que describieran el aroma de la frente de gato. Entre las descripciones que dieron algunos de los followers se recogió que la frente de gato olía "como el amanecer", "como un colchón secado al sol" o "como pan dulce".

Yamamoto Perfumery se inspiró en estos datos para crear el perfume "Mohu mohu odeko no kaoru Fabric Water" (fragancia de frente suave) y se presenta en un bote de 100ml en spray. El director de la compañía se dedico a oler cabezas de gato en los neko cafe para conseguir el aroma perfecto que solo se puede conseguir en Japón a través de internet.

Otra de las curiosidades que pudieron verse en Japón en el tema de los perfumes fue una campaña de Burguer King donde la empresa puso a la venta, junto con la comida rápida, un perfume inspirado en su famosa hamburguesa a la parrilla, el Whopper. El día 1 de abril del año pasado Burguer King puso a la venta en sus establecimientos el perfume que se podía adquirir junto con la hamburguesa con un precio que rondaba los 40€. Los usuarios dijeron que olía como una hamburguesa a la parrilla, como el aroma que percibes al entrar en Burguer King. Ni que decir tiene que los frascos de perfume se agotaron rápidamente.

¿Qué os parece la relación de los japoneses con los perfumes? 
¿Y de estas "curiosas" fragancias que cosechan éxitos en el país nipón?


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